cupure logo
delparaporconrealqueloslasmadriduna

Ferminicidio de verano

Ferminicidio de verano
Quién marcó el gol que sentenciaba la Liga en Cornellà? Fermín López. ¿Quién había anotado el golazo del 5-3 ante al Madrid que anuló incomprensiblemente Hernández Hernández? El propio Fermín. ¿Quién, una semana antes, había logrado el tanto de la remontada en Valladolid que permitía mantener el Madrid a raya? Fermín, el de siempre. El que lo da todo en cada acción, el que gira como nadie, el que hace que el fútbol del Barça sea todavía más vertical, el centrocampista que tiene más gol de la plantilla, el que mejor juega por detrás del delantero centro, el que surgió de la cantera sin hacer ruido y se ganó un puesto allí donde jugaban Pedri o Gavi, que han acabado retrasando su posición. Ahora, el Chelsea, que tiene buen gusto y necesidad de ilusionar, ha hecho una oferta de 50 millones por Fermín que al Barça le solucionaría, a corto plazo, los problemas de inscripción de tres jugadores que, hasta ayer, seguían sin ficha federativa: Szczesny, Gerard Martín y Bardghji. Ninguno de ellos es imprescindible para el equipo. Fermín, sí. Hansi Flick, en dos de las ruedas de prensa de esta temporada, ha sido muy claro: no quiere ninguna marcha más del equipo y, explícitamente, se ha referido a la necesidad de tener en sus filas a Fermín, a Gavi y a Casadó. Fermín fue el décimo jugador que más partidos jugó con Flick, con un total de 46 encuentros de 60 posibles. Ya con Xavi, su auténtico descubridor, había disputado 42 partidos y había conseguido 11 goles en una temporada donde el equipo estuvo bastante pamplinas. De no ser por la eclosión de Lamine Yamal y de Cubarsí, Fermín habría sido la revelación del año y de la Liga. Ese verano, lideró a España hasta el oro olímpico en París y fue designado mejor jugador del importante torneo. Sin embargo, Fermín -por su personalidad tranquila- no tiene tanto márketing como otros, ni tantas luces en el escaparate. Pero, futbolísticamente, en la media punta aporta más movilidad, mordiente y caos que un Olmo más intermitente, o que un Raphinha que por detrás del 9 es donde se encuentra más limitado. Como tantas veces en el Barça, para sembrar dudas sobre la continuidad de un jugador, o para que le cojan ganas de irse, o para darle un empujoncito, en las últimas semanas se ha filtrado alguna tirantez con un amigo del vestuario, se han contado las ofertas mareantes que tiene y… a ver si pica y se va a la Premier. Pero si Flick no quiere que se vaya y Fermín no quiere irse, ¿quién tiene tanto interés en pasaportarle a Inglaterra? Pensaban vender a Ter Stegen y la lesión impidió ponerle el puente de plata. Renovaron a Araujo con un asterisco para que Bayern o Juventus pagasen un buen traspaso por él, pero el uruguayo se quedó, más aún tras regalar a Iñigo Martínez al fútbol árabe. Así pues, Laporta contaba con unos ingresos que no han llegado y ahora ven en la posible salida de Fermín, una solución. Pan para hoy, hambre para mañana. Pero, si vendes a Fermín, de nuevo entras en las incoherencias entro lo dicho y los hechos. Deco, el director deportivo, antes del partido de Mallorca dijo, textualmente, hablando del fair-play: “No somos los únicos que hemos tenido dificultades. Lo podríamos arreglar con una gran venta, pero eso se ha descartado porque queremos mantener a los mejores. Sería muy fácil vender a uno y ya está, pero lo que queremos es dar estabilidad al proyecto y apostar por los jugadores que están y que creemos”. Dijo, pues, que estaba descartado. Era el 16 de agosto. No hicieron la gran venta, sencillamente, porque no pudieron. De fácil, nada.
mundo deportivo
hace alrededor de 6 horas
Compartir enlace
Leer mas >>

Comentarios

Noticias de fútbol