cupure logo
dellosqueunalaspormáscontraviñetaqué

Las tradiciones identitarias de la derecha española

Las tradiciones identitarias de la derecha española
El PP dice que, aunque ha firmado la prohibición en Jumilla de los actos religiosos islámicos, no los ha pohibido, pero busca priorizar "nuestras tradiciones". El PP, como Vox, cuenta entre ellas con mentir, intentar ocultar su corrupción, una desfachatez suprema o crispar la vida pública. Incluso dar o instigar golpes de EstadoEl PP y la normalización de las políticas ultras El hecho en sí ha sido que PP y Vox han prohibido en Jumilla, Murcia, los actos religiosos en centros deportivos que acogían celebraciones islámicas. A propuesta y exigencia de Vox, el gobierno del popular López Miras lo firmó para aprobar los presupuestos. Y han ocurrido algunos asuntos de lo más curioso. Uno es que el PP dice que, al firmar la prohibición en Jumilla de esos actos religiosos, no ha firmado en realidad la prohibición. Algo así como el gato de Schrödinger -que está potencialmente vivo y muerto al mismo tiempo- trasportado a la política. La reacción a esta islamofobia ha sido bastante fuerte, hasta los obispos católicos han expresado su censura a la medida, pero quedará en nada. Vox ha conseguido una baza más de su correligionario PP y esto va ya como una bala hacia unas políticas de extrema derecha, racistas y sin respeto ni a los derechos humanos. Porque tienen razón lo musulmanes de Jumilla: “Se empieza así y no se sabe dónde se acaba”. Lo peor es que sí se sabe dónde se acaba. De hecho, el PP catalán se ha apresurada a dar su apoyo a la medida, y se ha mostrado “a favor de vetar los actos islámicos”. El líder de Vox, Santiago Abascal, ya rentabiliza su logro, es un logro del partido ultra, y ha lanzado una soflama en X absolutamente islamófoba, en la que les acusa del totalitarismo que caracteriza a su propio partido. Se mira en el espejo para insultar a una religión y a los múltiples pueblos que la practican. Lo peor para quienes conservan alguna “esperanza” es que el PP se haya plegado a Vox, demostrando que son lo mismo. Y desde luego no hay lugar para el equívoco. Abascal declaraba estos días también su apoyo a Jair Bolsonaro, juzgado en Brasil por un fallido golpe de Estado que vimos todos en directo, retransmitido por la televisión. Sustentado también por Trump, al punto de clavar a su país unos aranceles del 50% para presionar a la justicia y que deje libre al golpista. En síntesis: Abascal apoya a un dirigente que intentó dar un golpe de Estado en Brasil y al que, como le salió mal, lo están juzgando. Y no pasa nada. El PP gobierna o pacta con Vox sin ningún problema Tampoco pasa nada cuando el líder de la Banda de “El que pueda hacer que haga” da el pistoletazo de salida a la brutal acometida que sufre el Gobierno y en consecuencia la democracia española. Volviendo a Jumilla, su alcaldesa, del PP, ha explicado la cuestión: “Vamos a priorizar nuestras tradiciones y nuestra identidad”. Ésa es la cuestión, lo que la derecha española entiende por sus tradiciones y su identidad, a las que ahora se incorporan las que avanzan al galope en el mundo mundial del mismo signo ideológico, algunas de ellas también con antigua raigambre. Porque, antes de nada, entre las principales señas de identidad de Jumilla está el Castillo que edificaron sobre un cerro... los árabes en el SVIII. El PP cuenta entre sus tradiciones más acreditadas mentir, corromperse e intentar ocultar su corrupción, una desfachatez suprema o crispar la vida pública hasta límites insoportables para la ciudadanía, solo por citar algunas y dejando fuera la de dar golpes de Estado. En esta atípica primera semana de agosto, el irritador de guardia, Miguel Tellado, ha desplegado una febril actividad de bulos e insidias. Con voz y gesto ad hoc, Tellado ha soltado una batería de mentiras inasumible. Hasta metiendo por medio a Huawei, que adoran sus correligionarios Ayuso, Moreno Bonilla y López Miras, precisamente. Líderes internacionales retoman también viejas tradiciones con total impunidad. Donald Trump extorsionando países enteros con cobros arbitrarios de aranceles que más se parecen a los atracos a mano armada que a una “política comercial” como se la llama en prensa. Netanyahu asesinando vilmente a los palestinos y decidiendo que ocupa la ciudad de Gaza en esa senda que se encamina a robar un territorio que no le pertenece y convertir la franja en un resort sobre los cadáveres de miles de personas, mientras la cobarde sociedad internacional traga y se pliega. Con la UE en cabeza para nuestra desgracia. Cómo no se van a animar el PP y Vox a lanzarse en plancha sobre lo que les venga en gana, ¿verdad? M.Rajoy aconseja no precipitarse en acusar a sus ministros, como Montoro, de corrupción, que ahí tenemos a Francisco Camps como ejemplo. Ha salido -según Rajoy- limpito de diez procesos por la gracia de la justicia. Salvo alguna cosa, claro. Porque han sido a pesar de las confesiones o las acusaciones directas de varios de sus más estrechos colaboradores en varias de las tramas. Y merece la pena detenerse en ello porque sin duda es una de las tradiciones identitarias cum laude del PP. El exministro de Rajoy fue condenado el 15 de octubre de 2024 a 10 años y 5 meses de prisión como jefe de la trama corrupta del Caso Erial. Además, el tribunal le impuso multas por un valor superior a 25 millones de euros. La única noticia posterior que localizo es que recurrió al Supremo su sentencia en marzo de este año basado en que hubo “pruebas fabricadas” que el fiscal busco clandestinamente en delatores. Se da el caso de que buena parte de los acusados junto a Camps llegaron a acuerdos de reducción de condena tras admitir su culpabilidad. Camps registró una milagrosa resurrección vital de su leucemia crónica cuando fue excarcelado en 2019, tras unos meses en prisión, al ser considerado un enfermo terminal. Ahora opta a la presidencia del PP valenciano y de la Generalitat de nuevo. Pero en donde el PP tiene un verdadero potencial es en Madrid. La presidenta Isabel Diaz Ayuso ha tenido el acierto de encontrar una pareja sentimental fuera de serie. Encausado por varios delitos, no tiene problemas en viajar con su pasaporte y su novia a Florida donde se ubica una empresa de su propiedad. Está en Boca Ratón, cerca de Miami. De actividad desconocida, Gonzalez Amador la creó en plena investigación fiscal, como informaba ElDiario.es. La Agencia Moody's estimó que facturó 620.000 dólares nada más crearse. El asistente personal de Ayuso, con sueldo público de la Comunidad de Madrid, nos ha revelado la joya que este país tiene con González Amador y por ende con su novia Isabel. Miguel Ángel Rodriguez ha lanzado a los cuatro vientos la clase de hombre, valiente, ejemplar que es. “Un ciudadano, sin más armas que su abogado y su valentía, lucha contra el Estado agobiante y logra que juzguen al fiscal general por un delito gravísimo, pero Sánchez tiene los santos güevos de no cesarlo. Esto es totalitarismo. Pero el fiscal va pa’lante e irá pa’dentro”. Más aún. Este español inigualable, González Amador, “es libre de enfrentarse a todo el aparato del Estado y sus medios de Comunicación y ganarles. Un ciudadano enfrentado a la tiranía. La libertad aún es posible, a pesar de los comunistas que nos gobiernan”. Ese comunismo que intenta evitar que los desaprensivos hurten al erario público el pago de los impuestos que deben pagar por sus enriquecimientos no se vio igual en parte alguna. Y esos medios totalitarios al servicio del comunismo de Sánchez es que ponen los pelos de punta. Estas son las tradiciones y la identidad del PP. Estos sus próceres y sus métodos. Su justicia que ayuda a doblegar a todo un fiscal general del Estado por el gravísimo delito -del que no hay indicio alguno- de enviar un email. Su prensa que calla. Y encima, ya ven. Este viernes ha entrado en vigor el Reglamento europeo de Libertad de Medios. A partir de este viernes es obligatorio que toda la publicidad institucional, su volumen y destino, sea transparente. Todas las instituciones públicas deben, desde hoy, asignar fondos de forma proporcionada y no discriminatoria, basándose en criterios objetivos y claros; evitar el uso de la publicidad institucional como mecanismo de presión o castigo político; y asegurar que las campañas publicitarias se identifiquen claramente como tales. Es de la UE; los que temen se les corte el grifo -el generoso grifo de dinero ajeno- no pueden acusar al Gobierno, que, de hecho, según nos cuenta Infolibre, no ha resuelto cómo aplicar parte de sus medidas. La eufemísticamente llamada publicidad institucional está en el origen de los éxitos “mediáticos” de Ayuso, y de gran parte de sus impunidades. De Ayuso, y de otros. Ayer murió Maribel Permuy, la madre de José Couso, el cámara español asesinado por el ejército de Estados Unidos en Bagdad, y un símbolo de dignidad y lucha por la justicia y los valores. Couso murió al lado mismo de nuestros queridos compañeros Olga Rodríguez y Carlos Hernández, testimonio vivo de que hay quienes resisten a tanta irracionalidad, tanta crueldad. Y así será siempre. Y hasta es posible que una vez más, cueste lo que cueste, se les impida a los malignos, a los infames, ganar la batalla total.

Comentarios

Opiniones