¿Quiénes son los nazis de Palestina?

Poco después de la masacre del 7 de octubre, muchos círculos occidentales alegaron que los israelíes estaban «actuando como nazis». La comparación merece un examen detenido. Si Hamás hubiera limitado su incursión a matar y capturar a unos pocos soldados, mientras ignoraba a los civiles, es fácil imaginar cómo enormes extensiones del mundo libre se habrían unido en elogios a esos «luchadores por la libertad». Israel habría tenido una tarea difícil, si no imposible, para convencer a cualquier potencia extranjera de que estaba en su derecho de bombardear Gaza, y mucho menos de lanzar un ataque terrestre. Sin embargo, el odio patológico hacia el judío llevó a Hamás a actos de abominación que, al menos temporalmente, alienaron a muchos. Esto nos lleva ochenta años atrás, cuando en los últimos meses de la guerra, en lugar de invertir sus medios en tratar de evitar la derrota, los nazis gastaron su esfuerzo bélico en asesinar judíos. Al igual que los nazis dieron prioridad a su lujuria criminal, Hamás dio (y sigue dando) la misma prioridad demente, y así 'sabotea' su propio esfuerzo bélico. Los nazis también se involucraron en la violencia sexual sistemática, y tenían sus burdeles en campos de concentración. Sin embargo, ni siquiera ellos filmaron sus violaciones. Tampoco se jactaron de sus víctimas, ni las pasearon desnudas y sangrando ante multitudes entusiastas en sus pueblos natales. Dönitz era un nazi. Sin embargo, unos días después de reemplazar a Hitler decidió que era inútil infligir más muerte y destrucción a Alemania y se rindió incondicionalmente. Así salvó miles de vidas alemanas. Hirohito también salvó innumerables vidas japonesas cuando aceptó la rendición incondicional y se impuso a aquellos de sus generales que deseaban continuar la guerra a pesar de la amenaza de más bombas atómicas. Sin embargo, Hamás no tiene tal dirigente, ni en los hoteles de lujo de Doha ni en los túneles de Gaza. Alemania podía sentir cierto orgullo y consuelo por aquellos que tuvieron la fibra moral para protestar contra los males del régimen. Bonhoeffer, el grupo de la Rosa Blanca o Helmuth Hübener lo pagaron con sus vidas, pero no se reporta el caso de un solo gazatí que simplemente diga que la masacre del 7 de octubre fue malvada por sí misma. La identificación con Hamás en las calles y campus de las grandes ciudades de Occidente es una exhibición vergonzosa de ignorancia, en el mejor de los casos, y odio, antisemita en el peor. Louis Garb . Jerusalén (Israel)