Listas negras y desobediencia civil

Existe una táctica muy socialista que consiste en legislar todo, y así van anulando derechos bajo la excusa de extenderlos. La objeción de conciencia es un derecho anterior a las leyes que me concede mi propia conciencia, forma parte de la dignidad del hombre y pertenece a lo más íntimo de la naturaleza humana. Además, como declaró el TC en una sentencia de 1985, «la objeción de conciencia forma parte del contenido del derecho fundamental a la libertad ideológica y religiosa reconocido en el art. 16.1 de la Constitución». El TC dijo que no es necesario legislarlo porque es inherente a las libertades fundamentales propias de un Estado de derecho. No podemos obedecer un mandato de la autoridad desobedeciendo a nuestra propia conciencia porque nuestra integridad moral sufriría un grave deterioro, e indisciplinarse sería la única manera de mantener íntegra nuestra dignidad humana. El Estado de derecho –cada vez más torcido, por otra parte– no puede restringir las libertades de los ciudadanos; más bien al contrario, tiene la obligación de salvaguardarlas. Ese registro de objetores al aborto que pretende el Gobierno se convertirá en instrumento más de la tiranía del Estado contra la libertad. Victoria Blasco López. Sevilla El hecho de que Trump haya elegido Budapest para reunirse con Putin demuestra mis temores por la cercanía entre el líder ruso y Orbán, líder de Patriots, grupo contrario al espíritu de la UE por su proyecto de la Europa de las Naciones, exaltación del nacionalismo, un cáncer para la convivencia y el progreso, porque significa volver al renacimiento de la rivalidad tribal. Es verdad que la rutina ha llevado a anomalías en la interpretación del espíritu de la Unión Europea, porque no se respeta lo establecido en el artículo 5 del Tratado de la Unión, que consagra la aplicación del principio de subsidiariedad, de manera que los Estados vienen dejando en manos de la UE competencias que deberían desarrollar por sí mismos, lo que supone un abandono de la esfera de soberanía que les corresponde, al tiempo que se produce una injerencia en competencias estatales, tal como les ocurre a los Estados respecto a las administraciones de menor base territorial, autonomías y municipios. Este desfase competencial es el que motiva que el nacionalismo encuentre razones para su ataque a la Unión Europea , lo que lógicamente aprovecha Putin para su objetivo continuo de desestabilizarla. Pablo Naranjo. Mahadahonda (Madrid) Si alguien cree que la reciente fijación de Trump hacia Pedro Sánchez –y por ende, hacia España– tiene alguna relación con los devaneos de este con China, sus desaires y embargos a Israel, su resistencia al gasto en defensa o sus apoyos –fragata incluida– a la causa palestina, hasta el punto de obtener la felicitación de la organización terrorista Hamás, puede que esté en el más profundo de los errores. Según Margarita Robles, toda la culpa la tiene la prensa española, que no desaprovecha ocasión de preguntar a Trump siempre por el asunto. José Muñoz Almonte. Sevilla

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