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No está en Málaga: esta es la otra 'Ronda' que se enconde en Andalucía y que tiene balnearios centenarios

Ubicado en el corazón de la Alpujarra almeriense, enclavada en las estribaciones de la Sierra de Gádor, se encuentra una joya escondida que, sin la fama de Ronda, ofrece una combinación única de historia, naturaleza y bienestar . Conocida como la «Puerta de la Alpujarra» , esta localidad destaca sobre todo por su balneario centenario, su arquitectura de origen árabe y su entorno montañoso que invita a la aventura. Este pintoresco municipio, cuyo nombre proviene del árabe al-hamma que significa «aguas termales» , es Alhama de Almería. Y se encuentra solo a 20 minutos de la capital almeriense, a una hora y 45 minutos de Granada, a dos horas y media de Málaga y a cuatro de Sevilla, por lo que puede ser una opción perfecta para una escapada de fin de semana. Las propiedades curativas de las aguas de Alhama de Almería se conocen desde tiempos antiguos. Los restos arqueológicos evidencian la presencia de termas romanas y baños árabes, lo que deja clara la importancia de estas aguas en distintas civilizaciones. El Balneario San Nicolás, ubicado en el corazón del pueblo, es el principal atractivo de Alhama. Sus aguas termales, de temperatura constante de 47,5 °C, son ricas en minerales como calcio, magnesio, sodio y potasio, y se utilizan para tratar enfermedades reumáticas, respiratorias, digestivas y nerviosas. Este balneario, que data de tiempos romanos, ha sido testigo de la evolución del turismo termal en la región. Actualmente el Balneario de San Nicolás c ontinúa ofreciendo tratamientos terapéuticos basados en las propiedades mineromedicinales de sus aguas. Los visitantes pueden disfrutar de circuitos termales, masajes y otras terapias en un entorno agradable. El balneario cuenta con una amplia variedad de habitaciones , para que cada huésped encuentre la opción que mejor se adapte a sus necesidades. Disponen de 20 suites junior, 12 habitaciones con terraza , 41 habitaciones dobles y 12 habitaciones individuales, todas ellas equipadas con las comodidades necesarias para una estancia confortable. Además, las suites junior pueden transformarse en habitaciones triples , para dar cabida a grupos de amigos o familias con niños. Pero las aguas termales con propiedades medicinales son «la joya de la corona» del balneario, ideales para tratar una amplia variedad de dolencias. Además, el balneario ofrece una gran cantidad de servicios de spa , para que los huéspedes disfruten de una experiencia relajante y rejuvenecedora. Podrás disfrutar de servicios de masajes, baño turco, baño de burbujas, sauna, ducha escocesa y chorros de presión, entre otros. El balneario también cuenta con un restaurante tipo buffet ideal para disfrutar de una cocina de calidad, elaborada con los productos más frescos y típicos de la Alpujarra almeriense . Pero aunque Alhama de Almería solo es conocida sobre todo por sus aguas termales, también se puede disfrutar de su impresionante entorno natural. Situada en la comarca de la Alpujarra almeriense, el municipio ofrece paisajes montañosos , senderos que serpentean entre olivares y almendros y vistas panorámicas que invitan a la contemplación y al descanso. Basta recorrer las calles y mirar los edificios de Alhama de Almería para ser consciente del legado histórico. Desde restos prehistóricos hasta vestigios romanos y árabes, el municipio es una mezcla de culturas. La fortaleza conocida como Los Castillejos, construida sobre un asentamiento de la Edad del Bronce , destaca como testimonio de su importancia estratégica en épocas pasadas. De hecho, en el municipio hay una serie de yacimientos arqueológicos de la Edad del Cobre y algunos de ellos protegidos como Bien de Interés Cultural (BIC). Está, por ejemplo, la Necrópolis megalítica de Loma de Galera, un yacimiento formado por 38 tumbas que datan del milenio III a. C. La necrópolis megalítica de Alhama, que está ubicada en una meseta formado por 55 tumbas y 3 alineaciones, y el llamado Fortín 12 de los Millares, un yacimiento formado por restos estructurales y material cerámico de la Edad del Cobre. Además, se encuentra La Puente , un viaducto de estilo neoclásico cuya construcción está relacionada con el auge económico que vivió la zona a comienzos del siglo XIX gracias a la minería y el cultivo de la uva de Ohanes. Se encuentra inscrito como bien de interés cultural , con categoría de Monumento, desde el 28 de noviembre de 2023 por su valor arquitectónico, histórico, etnológico, paisajístico, científico y técnico. Si bien la Semana Santa, decayó significativamente en los años sesenta, su popularidad se ha recuperado. Es de destacar la afluencia al Vía Crucis de la madrugada del Viernes Santo , muy sobrio. Lo que más sobresale es la procesión del Domingo de Resurrección, la del Niño Dios, que ante la devoción de los alhameños debe anunciarse en la Vigilia Pascual para calmar los ánimos. Esta emotiva tradición , que hacía las delicias del mismísimo y anticlerical Salmerón, consiste en procesionar al son de pasodobles una imagen del Niño Dios (ataviado con un racimo de uvas que simboliza el municipio) y otra de su Madre Santísima, entre carreras y gozosos bailes y encuentros de las imágenes mientras los alhameños se encargan de que no cese una enorme lluvia de papelitos. Prohibida, por considerarse obsceno el típico grito de: ¡Viva la pítica del Niño Dios! que suele decirse en la procesión, se recuperó ante la insistencia del pueblo en 1977. A pesar de la riqueza natural, histórica y cultural de Alhama de Almería, este municipio sigue siendo un destino poco conocido para muchos. Precisamente por eso, su tranquilidad, lejos del bullicio de otros destinos turísticos, lo convierte en un lugar ideal para quienes buscan descanso, bienestar y una conexión genuina con la historia y la naturaleza.

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