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Este es el pueblo perfecto para visitar en octubre

Este es el pueblo perfecto para visitar en octubre
El entorno zamorano donde disfrutar del otoño Una de las ciudades menos visitadas de España conocida como “La Perla del Duero” En el noroeste de Zamora, Puebla de Sanabria se alza como una de las villas medievales mejor conservadas de Castilla y León. Su casco histórico, declarado Conjunto Histórico-Artístico, ofrece un recorrido por calles empedradas, balcones de madera y tejados de pizarra que narran siglos de historia en cada rincón. La localidad está dominada por el castillo de los Condes de Benavente, una fortaleza renacentista del siglo XV que se levanta sobre un promontorio granítico en la confluencia de los ríos Castro y Tera. Su torre del homenaje, conocida como El Macho, es el mejor mirador: desde allí se divisan los tejados de la villa, el serpenteo del río Tera y, en el horizonte, las sierras de la Culebra y los montes de León. El castillo no es solo un emblema fotográfico, también fue clave en la defensa de la frontera con Portugal. Alfonso IX de León ya había concedido en 1220 una “carta puebla” para reforzar este enclave estratégico. Hasta 1895 mantuvo funciones militares, antes de convertirse en lo que hoy es: un ejemplo de transición entre fortaleza defensiva y palacio señorial. La visita a Puebla de Sanabria suele comenzar a orillas del río, junto al puente y el convento de San Francisco, desde donde se aprecia la fachada oriental del castillo asomando al precipicio. Desde allí, la empinada calle Costanilla conduce directamente a la plaza Mayor, corazón de la villa. En este lugar destacan la iglesia de Santa María del Azogue, con su campanario visible desde todo el casco viejo, y la Casa Consistorial, considerada el edificio civil más elegante gracias a su galería porticada y sus torrecillas. A apenas unos kilómetros, el Parque Natural del Lago de Sanabria añade otro motivo de visita. Este lago glaciar, el mayor de la península ibérica, está rodeado de bosques y senderos que lo convierten en un lugar privilegiado para caminar, observar fauna como el lobo ibérico o la nutria, y disfrutar de un paisaje que cambia radicalmente en cada estación. ¿Por qué en octubre? El otoño es, probablemente, el mejor momento para descubrir Puebla de Sanabria. La razón está en sus bosques: robles, castaños y abedules tiñen el paisaje de tonos rojizos, ocres y dorados, lo que transforma las rutas de senderismo en experiencias únicas. El propio Lago de Sanabria refleja estos colores y convierte cada fotografía en una postal otoñal. Además, la gastronomía local se enriquece en esta época con productos de temporada. Setas recién recolectadas, guisos de carne de caza, embutidos curados y quesos artesanos son protagonistas en las mesas de la villa. Comer en Puebla de Sanabria en otoño es tanto una experiencia cultural como culinaria. Por último, octubre ofrece la ventaja de la calma. Lejos del bullicio del verano, el visitante puede recorrer con tranquilidad sus calles medievales, acceder sin prisas a miradores como el del castillo y disfrutar del entorno natural en un clima fresco pero todavía agradable. Una combinación perfecta de historia, naturaleza y cultura que convierte a Puebla de Sanabria en uno de los destinos imprescindibles del otoño en España.

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